El entorno en el que nos movemos afecta también a nuestra calidad de vida puesto que afecta a nuestro humor y estabilidad. Puedes hacer la prueba, quédate en un lugar oscuro, y desordenado y verás cómo tu estado de ánimo empeora. Sin embargo, si estás en una habitación limpia, ordenada, ventilada y bien iluminada seguro que te sientes mejor. De esto trata la filosofía del feng shui, de proveer los espacios de armonía para que tu vida sea más equilibrada, próspera y feliz. La tecnología moderna y la superpoblación han creado graves problemas de contaminación del aire o el agua. Pero también la producida por ondas electromagnéticas.
Estos problemas afectan a los ciclos naturales y vitales de las personas. Consecuencia de ellos es la alteración de la naturaleza y del ser humano. Las emociones, la salud, la armonía y la vida misma se ven afectadas. La tecnología es muy útil, da movilidad y comodidad, pero a la vez, la necesidad de servirnos de elementos electrónicos potencia la presencia de un chi negativo que termina por sumar puntos al estrés. Mucha de esta tecnología es inalámbrica lo que provoca que el ambiente esté cargado de ondas electromagnéticas.
La interferencia de las ondas electromagnéticas afecta los estados de ánimo y, por tanto, la convivencia en el hogar. El movimiento energético invisible e impredecible ocurre con todo equipo que se encuentre en una orientación inadecuada. Por ello debemos aprender a equilibrar dicha fuerza dentro de la decoración de nuestro hogar.
Los aparatos inalámbricos, entre los que se encuentran móviles, consolas de videojuegos, aparatos wifi… se están convirtiendo en imprescindible en hogares, negocios y hasta escuelas. El problema radica en las ondas moduladas o pulsátiles de microondas (un tipo de ondas de radio). Son las que estas tecnologías utilizan para transportar información desde y hacia los demás y hacia su estación de base.
Ondas electromagnéticas y feng shui
Al aumentar el número de aparatos inalámbricos también aumenta nuestra exposición a las ondas electromagnéticas alrededor de nosotros. En los últimos años nuestra exposición promedio se ha incrementado exponencialmente, y es probable que siga aumentando.
Obviamente en la antigua China no existían ordenadores ni televisiones por lo que no se pudieron hacer reglas de Feng Shui para estos aparatos por lo que ha sido necesario ir creándolas. Os ofrecemos algunos consejos para lograr la mejor distribución de la tecnología y los muebles, y así conseguir una perfecta atmósfera Zen, minimizando los efectos negativos de la tecnología.
Debes mantener siempre la distribución de los objetos, colores y tecnologías de la forma más simple y sencilla posible. Debes trabajar con el chi para mantener un flujo de energía estable, medio y continuo en el espacio. Para no confundir la energía o el chi de una habitación debes mantenerla natural y simple.
Iluminación y colores
Los focos o luces en las esquinas de una habitación hacen que la energía circule de forma lenta y que se estanque, por lo que favorecen la negatividad. Elimina los rincones sombríos de energía y deja que la luz brille en todo el espacio.
Las luces brillantes cerca del ordenador aumentarán y moverán el chi alrededor del espacio de trabajo, lo cual favorece la creatividad, las ideas y el pensamiento positivo.
Los colores de “crecimiento” como el verde y el amarillo, que simbolizan las plantas y los rayos de sol, deben estar presentes en las zonas este y sureste de tu hogar, de forma que estos colores apoyen y hagan aumentar la energía entre los espacios a tu alrededor.
Los colores ardientes como los rojos y amarillos deben estar situados en la zona sur de la habitación para que puedan atraer hacia ti la energía positiva, el entusiasmo y las oportunidades. Algunos colores “sólidos” bien elegidos son más aconsejables que los estampados.
Es recomendable colocar plantas de hoja perenne en las zonas este, sureste,, norte y sur de tu hogar, puesto que ayudan a mover la energía natural o chi, alrededor de los espacios, creando un flujo que te atrae a ti y a tu espacio lo mejor del mundo exterior.
Los metales redondeados, como latas de latón, cuencos de cobre o jarrones deberían estar emplazados en la zona oeste, noroeste y norte de la habitación debido a que transforman la energía estanca en estable y fluída. Estos jarrones y cuencos deben permanecer vacíos, para esperar que las oportunidades caigan en ellos.
Si alguna vez has rozado la pantalla de tu TV o monitor con tu brazo has notado como los vellos se “levantan” como si fueran atraídos por algo en la superficie. Lo que se siente es energía estática, una energía residual que queda luego de encender el aparato. Así como afecta tu piel, la energía residual de todo aparato eléctrico fluye por tu casa e interfiere con el Chi de tu cuerpo.
Los televisores no son recomendables en las habitaciones. Si los tienes, mantenlos dentro de un mueble. Usar preferiblemente los plasma o LCD que no producen reflejo. Los faxes, fotocopiadoras y otros equipos de oficina deben estar siempre en el despacho, el lugar de trabajo. Para atraer grandes negocios y amistades influyentes activa el fax con 3 monedas chinas atadas a un cordón rojo. Los cables de TV y computadoras procura tenerlos ordenados y ocultos.
Los Ventiladores evita instalarlos en el techo de la habitación donde duermes, ellos cortan la energía de la pareja y desordenan la energía del cuerpo.Las computadoras portátiles no deben estar dentro de la habitación donde duermes.