Cuando se sueña con animales lo que está expresando nuestro inconsciente es la necesidad de desentrañar los instintos más primarios. Los más naturales y los sentimientos más profundos y verdaderos, libres de cualquier constricción cultural. Los animales son el símbolo del comportamiento humano. Ya que representan los instintos más primitivos, su naturaleza sexual. La interpretación, eso sí, dependerá de las cualidades del animal que se vea en el sueño. Puede parecer que soñar con hipopótamos sea poco común. Pero, aunque cueste creerlo, es uno de los animales que más se ven en sueños.
El hipopótamo uno de los animales más grandes (sólo lo superan la ballena y el elefante), vive en África. Las peleas entre ellos son muy violentas, pero raramente terminan con la muerte. Las profundas heridas que se infieren en las peleas raramente se infectan y cicatrizan rápidamente. Este animal simboliza la fuerza bruta y aquellos impulsos y vicios que el hombre no puede dominar por sí solo. Es decir, que exigen ayuda para conseguirlo, y lograr así espiritualizarse y elevarse por encima de la materia. Soñar con hipopótamos se asocia a reacciones violentas que podemos haber tenido por algún ataque o un problema.
Soñar con hipopótamos. Significados
Si sueñas que ves un hipopótamo, significa que has explotado o vas a explotar por algún ataque o problema. Soñar que un hipopótamo te ataca, significa que tendrás una pelea y lo más probable es que sea violenta. Sin en cambio, soñar que un hipopótamo se acerca de manera dócil y pacífica, significa reconciliación con nuestros enemigos.
Cuando un hipopótamo se presenta en nuestro sueños es para enseñarnos diferentes aspectos de las relaciones sociales, ya que por sus características, estos animales sólo cuidan su territorio acuático y pocas veces se pelean por el espacio en la tierra, donde comen o descansan, esto nos enseña que debemos cuidar nuestro espacio personal pero sin perjudicar a quienes nos rodean.
También nos enseña que no es necesario ser ágiles ni graciosos para lograr nuestros objetivos si sabemos qué es lo que queremos. El hipopótamo llega para enseñarnos lo bueno de ser prácticos, estables y de seguir con patrones establecidos para no apartarnos de nuestra senda.
Los hipopótamos están íntimamente relacionados con los ríos, el significado de su nombre que procede del griego: “el que está debajo del río” ya nos lo índica, es por ello que cuando soñamos con hipopótamos aunque no lo veamos claramente estamos aludiendo también a un río, a lo mejor no lo vemos pero si hay un hipopótamo hay un río. Depende cómo sea el río de nuestro sueño significará una cosa u otra.
Un río de aguas apacibles y claras denota felicidad, placer y prosperidad en general. Si sus aguas son turbias o está agitada, será víctima de los celos y habrá muchas discusiones. Es la señal de un hombre venerable. Entrar en un río significa compañía de gente de alta prosapia. No es un buen signo beber agua de un río. Saltar de las aguas de un río a la orilla: salvación de un peligro o de un enemigo.
Entrar en un río de aguas turbias y beber aguas puras y claras, se traduce por bienestar, vida tranquila y feliz. Cruzar un río sin tropiezos, pese a sus olas y correntadas, es un buen augurio. Los perjuicios y daños que el río causa en el sueño, es una realidad en la vigilia. La llegada de agua clara de un río hasta una casa, es signo de riqueza y bienestar. El fluir de sus aguas puede simbolizar el fluir de la vida y las generaciones, revelando entonces nuestros deseos de perpetuarnos, de prolongar nuestra vida ya sea a través de nuestros hijos de nuestras obras.
Por último, cuando el río fluye es que una corriente de energía y de sentimientos fluye también en nosotros, y a veces, cuando nos limitamos a contemplar el fluir de las aguas que se pierden en la lejanía, refleja que estamos dejando perder energías y dichos sentimientos sin aprovecharlos. Presagio de cambio importante.
Toda señal deberá ser interpretada: las orillas del río, sus aguas, la razón de la presencia del soñador, sus ocupaciones. El análisis de estos parámetros definirá así el valor simbólico de la premonición considerada. Aguas vivas, límpidas, claras: cumplimiento de sus proyectos, promesa de éxito y felicidad. Aguas turbias, agitadas o fangosas: preocupaciones, trastornos, contrariedades, situación comprometida, decepción en los negocios, pérdida de dinero, deudas; relaciones afectivas y amistades perturbadoras.
Un río que provoca inundaciones: mala suerte, ruina, quiebra, miseria. Aguas violentas, que lo arrancan de la costa y lo arrastran: desamparo, soledad, desgracia. Así que, después de todo lo dicho aquí, podemos ver que soñar con hipopótamos o ríos no debe trastornarnos pero debe hacer que prestemos atención a nuestros actos en la vida cotidiana ya que son un aviso de lo que nos puede ocurrir.