Los mudras son movimientos de yoga que se realizan con los brazos y las manos. Son muy sencillos, pero muy poderosos. En el yoga, se deben utilizar diversas técnicas para abrir los circuitos de energía, como la respiración, mantras y los mudras. Reciben este nombre los gestos que atrapan y guían el flujo de energía y reflejos al cerebro. Doblando, cruzando y tocando los dedos y las manos, podemos hablar con el cuerpo y la mente.
En los dedos comienzan algunos meridianos de acupuntura. Al unir ciertos dedos se forman circuitos electromagnéticos en nuestro cerebro. Al practicar un mudra estamos afectando el sistema nervioso, los meridianos y los canales de energía. En otras palabras, podemos influir en nuestro estado de ánimo y nuestra mente con solo doblar, cruzar, extender o tocar los dedos.
Para qué sirven los mudras
Los mudras canalizan, equilibran y restauran el nivel energético de nuestro cuerpo. Al realizar estas presiones en el cuerpo, la energía puede fluir por los “nadis” y proporciona paz, seguridad y tranquilidad al meditante. Los mudras se pueden realizar conjuntamente con diferentes sistemas de meditación o relajación.
La palabra mudra proviene del sánscrito y significa “sello o llave”, el término mud significa gozo y ra significa producir, con lo que podríamos entenderlo como “la llave que produce gozo”. Estas posturas simbólicas de los dedos o del cuerpo pueden representar plásticamente determinados estados o procesos de la conciencias. Pero las posturas determinadas poden también, al contrario, llevar a los estados de conciencia que simbolizan. Parece que los mudras se originaron en la danza hindú, que es considerada expresión de la más elevado religiosidad.
Realizando un mudra conseguiremos liberar la energía bloqueada en el cuerpo, por los canales de energía y los chakras. Todos los mudras tienen un beneficio, un movimiento de energía, lo único que debemos de preocuparnos es de realizarlos con intención y de una manera continuada, para notar sus efectos. Lo más aconsejable es practicar entre 5-20 minutos al día cada mudra, por eso es conveniente no realizar una práctica con más de tres mudras a la vez.
Los mudras de yoga tienen una estrecha relación con los cinco elementos vitales del cuerpo. Los mudras pueden utilizarse para equilibrar estos cinco elementos, que son el agua, la tierra, el éter, el aire y el fuego. Cualquier deficiencia o exceso de cada elemento puede causar un desorden o desequilibrio en la mente y el cuerpo. En nuestra mano, los principales canales de energía son los cuatro dedos y el quinto que cierra en circuito es el pulgar.
Dedo índice: ondas Alfa. Estado meditativo. “vigilancia relajada” desprovista de actividad sensorial intensa.
Dedo corazón: ondas Beta. Estado de alerta y concentración. Resolución problemas.
Dedo anular: ondas Delta. Sueño profundo. Actividad cardíaca y respiratoria al mínimo.
Dedo meñique: ondas Eta: Estado similar a Alfa. Salud, creatividad y paz profunda.
Significados de los dedos en los Mudras
Pulgar: Se representa con el elemento Fuego, asignándole funciones sobre el pulmón, la lógica y la fuerza de voluntad.
Índice: Simboliza al Aire y controla el estómago, el pensamiento y la mente.
Corazón: Se le asocia con el elemento Éter, y se le asignan funciones sobre la circulación sanguínea y la vesícula.
Anular: Representado al elemento Tierra, el dedo anular controla el hígado, la vitalidad y la buena salud general.
Meñique: En este caso se trata del elemento Agua y se encuentra vinculado directamente con el corazón, la sexualidad, la comunicación y las relaciones.
Los mudras pueden practicarse sentado, echado, de pie y andando. La postura de su cuerpo debe ser simétrica y centrada y estar tan relajado y distendido como le sea posible. Si lo practicas sentado en una silla, deberás mantener la espalda erguida y los pies bien afianzados en el suelo. Y si lo haces echado, la posición más adecuada es tumbado de espaldas. Pese a esto lo la postura más recomendable es la posición clásica de la meditación. Lo importante es estar relajado y distendido, ya que cualquier tensión impide el flujo interior de la energía, y lo que pretendemos con los mudras es hacer fluir algo nuevo.
Los mudras deben practicarse con las dos manos a la vez. Los dedos se van uniendo entre sí de maneras muy diversas y con presiones muy diversas donde a veces sólo es necesario un leve roce y otras, se necesita una gran presión. Debido a la diferente cualidad de cada uno de ellos, es recomendable utilizarlos durante un tiempo determinado que suele ir de 3 a 45 minutos.
Su práctica es realizada generalmente por budistas e hinduistas en técnicas de relajación o meditación avanzadas, pero es totalmente compatible con cualquier otra filosofía, ideología o creencia, ya que el propósito fundamental de estos gestos corporales es llegar a una conexión energética cuerpo-mente. La forma de hacer los mudras, debe de ser suave y completamente relajada, la unión de algunos de los dedos en cada uno de los mudras que a continuación veremos, tienen significados especiales, para efectos de trasladar nuestra consciencia al nivel requerido, o para hacer el trabajo determinado en que nosotros estamos inmersos.
Mudras principales
Rezo Mudra: Se realiza presionando las palmas de las manos juntas firmemente, este Mudra nos ayuda a escuchar, a enfocarnos física y mentalmente, nos conecta con nuestro ser superior, neutraliza lo positivo (masculino) y la parte negativa (femenino) del cuerpo. Se practica antes de empezar una clase de Yoga.
El mudra jnana, conocido en algunos linajes de yoga como Chin Mudra, implica un gesto de la mano que pretende proporcionar un enfoque dirigido hacia el interior y traer un impacto positivo en la respiración. Además, los médicos creen que este mudra expresa la unión de nuestra humanidad individual con la divinidad cósmica. Por estas razones, a menudo se practica en conjunto con la meditación o ejercicios de respiración.
Mudra de la Sabiduría: Se realiza uniendo el dedo pulgar con el dedo medio de ambas manos, el resto de los dedos también quedan extendidos, al igual que en el Mudra anterior, en este caso lo que se pretende, es conectarnos con la sabiduría universal y cuando lo desees hacer, cuando hagas tus relajaciones, utiliza este Mudra y cosas importantes surgirán en lo más profundo de tu consciencia.
El mudra viparita kurani o postura conocida como lago invertido, significa colocar el cuerpo al revés. Es un mudra que ayuda a tranquilizar y los profesores de yoga creen que desencadena el estado de sanidad que ayuda a «descansar y a digerir», alivia el insomnio, la ansiedad, problemas de fertilidad, de digestión y elimina otros problemas parecidos.
El mudra pranam, también conocido como Atamanjali, estimula la armonía, equilibrio y paz interior, al unir ambas manos se cierra un circuito electromagnético que hace circular la energía dentro del propio cuerpo y lo recarga. Posición Manos: Se juntan palma derecha con izquierda a la altura del pecho, pulgares tocan levemente esternón.
Dhyani Mudra: La posición de las manos en este mudra forman una especie de cuenco, esto representa estamos libres y limpios para recibir la energía del universo. Cabe destacar que es importante estar en un estado de armonía y paz para realizar el mudra, ya que si en nuestro interior prima algún sentimiento negativo este puede afectar la nueva energía que llega a nuestro “cuenco”. Posición Manos: Se apoyan las manos sobre las piernas colocando mano derecha sobre la izquierda, pulgares se tocan suavemente.